Enfermedades mentales como el Alzheimer y la espasticidad presentan problemas en su curación, tanto por la incapacidad de adherencia al tratamiento, como por la dificultad de los pacientes para tragar los medicamentos. Ante esta realidad, investigadores de la Universidad CEU Cardenal Herrera en colaboración con la Universidad de Ginebra (UNIGE), acaban de probar la efectividad del tratamiento de estas enfermedades a través de la piel, que posiciona esta alternativa como una opción prioritaria.
En concreto, una investigación del Instituto de Ciencias Biomédicas de la Universidad CEU Cardenal Herrera, realizada por Sergio del Río Sancho, plantea que son escasos los fármacos que reúnen las cualidades físico-químicas adecuadas para una administración transdérmica eficaz, pero demuestra que es factible su uso a raíz de tratar estas sustancias a través de diferentes estrategias promotoras. Entre estas estrategias encontramos: formulaciones tópicas (geles y parches), el uso de láser, o la aplicación mediante iontoforesis (mediante la aplicación de corriente continua de baja intensidad).
La investigación se enmarca en uno de las líneas del Grupo de Investigación “Desarrollo de formas farmacéuticas de aplicación sobre la piel”, del Instituto de Ciencias Biomédicas de la Universidad CEU Cardenal Herrera. En esta investigación también han participado los doctores de la CEU-UCH, Alicia López Catellano y Andrés Feménia, y Virginia Merino, investigadora del Centro de Reconocimiento Molecular y Desarrollo Tecnológico de las Universidades de Valencia y la Politécnica de Valencia. Parte de los resultados de esta investigación han sido publicados en la revista farmacéutica European Journal of Pharmaceutics and Biopharmaceutics.
