En un mercado laboral cada día más complejo, encontrar una profesión con futuro es una tarea difícil. No obstante, trabajos que exigen un alto nivel de especialización puede ser una garantía de éxito. En este sentido, los traductores jurados en Sevilla, Madrid o Barcelona son profesiones que están teniendo una salida profesional cada vez más demandada, ya que las traducciones, en un mundo globalizado, son cada vez más necesarias. Se trata pues de oficio fundamental para la sociedad debido a la gran cantidad
En un mercado laboral cada día más complejo, encontrar una profesión con futuro es una tarea difícil. No obstante, trabajos que exigen un alto nivel de especialización puede ser una garantía de éxito. En este sentido, los traductores jurados en Sevilla, Madrid o Barcelona son profesiones que están teniendo una salida profesional cada vez más demandada, ya que las traducciones, en un mundo globalizado, son cada vez más necesarias. Se trata pues de oficio fundamental para la sociedad debido a la gran cantidad de documentos que necesitan ser validados y sellados por un traductor oficial.
Una traducción jurada es una traducción oficial, firmada y sellada por un traductor jurado, nombrado por el Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación (MAEC) y cuya función es la de certificar que la traducción realizada es fiel al contenido del documento original. Por ello, esta profesión ofrece la ventaja de que no puede haber intrusismo profesional, ya que solo los traductores nombrados pueden ejercer esta profesión. Además, ser traductor oficial no impide que se puedan realizar otros trabajos de traducción si se desea.
En este sentido, la traducción jurada tiene unas particularidades frente a una traducción normal, que podemos resumir en los siguientes puntos: la traducción jurada sólo puede entregarse en papel, nunca por correo electrónico; siempre tiene que incluir la certificación, la firma y el sello del traductor jurado; por tanto, sólo puede ser llevada a cabo por un traductor jurado habilitado por el MAEC.
Entonces… ¿cómo podemos llegar a ser traductores jurados? Es una profesión que se puede adquirir con la carrera de traducción, cursando un número determinado de créditos de traducción jurídica, o mediante un examen el Ministerio de Asunto Exteriores, que se celebra todos los años. Los aspirantes al examen deben reunir los siguientes requisitos: ser mayor de edad, nacionalidad española o de cualquier Estado miembro de la Unión Europea, estar en posesión de al menos el título español de diplomado universitario, ingeniero técnico, arquitecto técnico o equivalente, o bien algún título extranjero homologado.
El examen consta de varias pruebas: traducción de la lengua extranjera al español de un texto literario o periodístico; traducción del castellano a una lengua extranjera de un texto literario o periodístico; y, traducción al castellano de un texto jurídico o económico, haciendo uso de un diccionario como apoyo. Una vez superadas estas tres fases y para poder valorar la capacidad de comprensión y expresión oral de la lengua extranjera, se realiza un resumen oral de un texto escrito. Es un examen muy exigente pero que, una vez superado, nos habilita para realizar traducciones oficiales.