“Afrontamos el partido con bajas, aunque bien es verdad que la enfermería se está liberando. Nico Pareja se quitó el cabestrillo, Reyes ya ha hecho carrera continua y ha tocado el balón sin dolor alguno y todo hace indicar que entre esta semana y la que viene vamos a recuperar efectivos… Vamos a Barcelona con ilusión, sabiendo que nos vamos a enfrentar al mejor equipo del mundo, pero no me cabe la menor duda de que la plantilla va a dar la cara”, aseguró. En la misma línea, aseguró que “a mí siempre me gusta un Barça-Sevilla porque es un habitual en la competición española y es evidente que el desequilibrio económico que produce el injusto reparto televisivo hace que las diferencias sean insalvables y haya a final de temporada una diferencia de 40 puntos”. Refiriéndose al encuentro del jueves de la semana que viene ante el Estoril, el presidente desmintió que el choque se vaya a jugar en un campo que no sea el habitual del conjunto luso y afirmó que al Sevilla le concederán hasta 2.500 entradas.
“El escenario va a ser el campo del rival. En ningún momento se ha hablado que se dispute el encuentro en un escenario distinto. Hemos pedido hasta 2.500 entradas, nos van a mandar alrededor de 1.200 o 1.300 , que estamos esperando que lleguen. Y nos darán el resto hasta 2.500 en el caso de que las pidiéramos”. Finalmente, hablando de la situación del equipo, admitió que “esperaba tener algún punto más en el casillero, pero ya he dicho que esto es un proyecto a tres años y que tenemos que tener tranquilidad, porque hemos cambiado hasta 14 jugadores en la plantilla. Vamos a esperar a que el equipo se adapte y seguro que más pronto que tarde se conseguirán los resultados”.