La fibrilación auricular (FA) es la arritmia más frecuente y afecta principalmente a la población mayor. En la Unión Europea se diagnostican cada año más de 600.000 nuevos casos de fibrilación auricular (FA). La obesidad, el envejecimiento de la población y el deporte de resistencia son causa de que en los próximos años se multiplique este tipo de arritmia (FA). La insuficiencia cardiaca y el riesgo de embolia principales peligros de la fibrilación auricular (FA)
El coordinador del Club Cardiosaludable Riojano, el cardiólogo Julio Martínez Florez, impartirá mañana. martes 19 de marzo a las 20,00 horas la conferencia “Vivir con arritmias. ¿Qué son? ¿Se pueden prevenir? ¿Se pueden tratar?”. Se trata de la primera conferencia del Club Cardiosaludable en este 2013 que tendrá lugar en el Centro Cultural Caja Rioja-Gran Vía y que contará como ya es habitual con intérprete de lengua de signos. La entrada es libre.
Esta primera etapa del Club Cardiosaludable en 2013 está integrada por 3 conferencias y dos talleres de cocina a cargo del restaurador Francis Paniego.
El Club Cardiosaludable Riojano es una iniciativa del Hospital Viamed Los Manzanos en colaboración de Fundación Caja Rioja que surge con el objetivo de ser un punto de encuentro donde los riojanos, bien porque hayan sufrido algún proceso cardiovascular, bien por tener algún familiar con enfermedad cardiovascular, bien por ser sensibles a la necesidad de llevar una vida cardiosaludable, encuentren apoyos, ayuda, respuesta a sus dudas, pautas para una vida más cardiosaludable en definitiva.
Existen muchos tipos de arritmias. Cada una de ellas requiere un tratamiento diferente, también los síntomas, su gravedad y la repercusión sobre la calidad de vida del paciente puede ser muy variable.
Logroño 18 de Marzo de 2013.- Las arritmias suponen una causa frecuente de consulta médica. Los síntomas que producen son palpitaciones, dolor en el pecho, mareos, pérdida de conocimiento (síncope) o incluso la muerte. En ocasiones las arritmias pueden pasar desapercibidas para el paciente y detectarse casualmente cuando se realizan pruebas diagnósticas.
Los latidos del corazón ocurren como consecuencia de unos impulsos eléctricos que hacen que las aurículas y los ventrículos se contraigan de forma adecuada, sincrónica y rítmica. Una arritmia es cualquier alteración del ritmo normal del corazón. Cuando el corazón late demasiado rápido se denomina taquicardia y cuando el ritmo es lento hablamos de bradicardias. Ni la taquicardia ni la bradicardia constituyen enfermedades por sí mismas, sino que pueden ser signos clínicos de alguna patología cardíaca subyacente.
El ritmo irregular con palpitaciones es la percepción del paciente en casos de arritmia, y que en la mayoría de las veces no corresponde a ninguna patología, y en cambio, en otros casos, si este ritmo irregular tiene continuidad es cuando puede hablarse ya de fibrilación auricular (FA). Aproximadamente, el 30% de los episodios de fibrilación auricular se consideran de causa desconocida. Existen factores que predisponen a la FA como la herencia, la obesidad, el deporte de resistencia, el estrés intenso y el consumo de alcohol, cocaína, tabaco y otras drogas. Asimismo, existen casos de fibrilación auricular con un claro componente genético, en los que un número importante de componentes de una misma familia presentan la arritmia. Por otra parte, la obesidad se ha relacionado con la aparición de fibrilación auricular, aunque ésta puede actuar también a través de otros factores de riesgo asociados, como son la diabetes y la hipertensión arterial. El estrés también puede desencadenar la arritmia a través de la liberación de adrenalina, así como lo puede hacer cualquier causa de excitación, como ocurre en el hipertiroidismo o con el consumo de ciertas sustancias, como la cocaína y las anfetaminas.
La prueba diagnóstica de referencia es el electrocardiograma y existen otras pruebas más complejas como el Holter, pruebas de esfuerzo, estudios electrofisiológicos o ecocardiogramas.
La adquisición de hábitos de vida cardiosaludable permite prevenir problemas del corazón. El comer con pocas grasas y sal, evitar el consumo de alcohol y drogas, abstenerse de fumar, el practicar ejercicio físico, adelgazar, evitar el estrés y controlarse la tensión arterial, permiten reducir la probabilidad de sufrir fibrilación auricular. En cuanto al deporte, hay que recordar que es bueno practicar un ejercicio físico moderado, sobre todo que no sea de resistencia de alta intensidad.