América Latina es una de las extensiones de población con mayor riqueza cultural en el mundo, cuenta con grandes aspectos y situaciones históricas que la convierten en una caja de sorpresas que solo espera a ser abierta para dar a conocer lo bueno o lo malo que dentro de ella pueda estar escondido.

No se trata de una simple situación que pueda resolverse con un retoque de maquillaje por aquí y otro por acá; no es un mal pasajero que basta con aliviarlo con un par de analgésicos para el dolor; tampoco es un defecto que pueda corregirse cambiando las piezas que provocan el aparente fallo en el funcionamiento de la maquinaria completa y mucho menos un fallo que requiera eliminar dichas piezas.

Y es que para la clase dominante, la oligarquía prepotente, las sociedades nos hemos convertido en una máquina más que es de su propiedad, la cual pueden manejar a su antojo y gana. Es decir, mandan a sus operarios a encender, manipular y apagar las situaciones sociales en la forma y momento en que a ellos, como dueños y señores se les ocurre. En países como los nuestros, los señores feudales modernos ponen y mantienen a los gobiernos que mejor pueda responder a los intereses de grupos partículares que tienen el control económico. Pero como no pueden hacerlo ellos mismos ya que pondrían en riesgo su "intachable imágen social", han tomado como su grupo de operarios o subordinados a los jefes de muchos de nuestros medios de comunicación escritos, televisivos y radiales; quienes cegados por el brillo del dinero prefieren obedecerles antes que ser objetivos y pensar en la verdadera prioridad que es el desarrollo de la población a través de una información veráz.

Diez años han transcurrido ya de este nuevo siglo y cada vez más se reciente la forma en que los grupos oligarcas controlan todos los medios de comunicación másiva y la idea de concebir la información por medio de la Libertad de Prensa, se convierte día a día en un mito cada vez más grande. Y es que cuando hablamos de información y comunicación, debemos analizar las diferentes posturas que tanto la prensa escrita como radial y televisiva nos proponen a nivel mundial, puesto que la pregunta es ¿cuál es el fin que persiguen los medios de comunicación al proteger a ciertos grupos sociales en nuestros países? Basta con ver que cuando algo que "afecta el interés económico" de los poderosos, estos mismos grupos oligarcas realizan un chasquido de dedos y los directores de los medios publican o no determinada información.

Hoy en día los diferentes medios recurren a la publicidad con el fin de alienarnos y enajenarnos de nuestra sociedad y de los problemas que ella atraviesa, nos convierten en simples consumidores combulsivos y nos crean necesidades absurdas y sin sentido, compramos lo que ellos nos venden aún sin necesitarlo, despilfarramos el dinero que nos ganamos con nuestro sacrificado trabajo y lo único que hacemos es regresarles el dinero a ellos, a los grupos de prepotentes explotadores, que nos manipulan a traves del cine, la televisión y la radio.

Hasta cuando entonces dejaremos de ser simples consumidores, lectores de información parcializada, espectadores de medios de comunicación vendidos y serviles al sistema imperante que se ponen de rodillas ante aquellos que manejan nuestros países a su gana y antojo. Esperemos que pronto se levanten grupos de verdaderos comunicadores y periodistas conscientes, que defienan los intereses de las mayorías desprotegidas y que realmente se avive el valor de la LIBERTAD DE PRENSA en América Latina y el Mundo entero, para que por fin, nuestros pueblos puedan salir de este subdesarrollo en el que los mismos oligarcas nos tienen enterrados.