El pequeño Zahorí explica la história de David, que vive con sus padres en una zona azotada por la sequía. Las duras condiciones de vida provocan un paulatino éxodo de los habitantes de la zona. En este dificil contexto, David recibirá una visita inesperada.
El crowdfunding es una forma de recaudar dinero para la creación de un proyecto de cualquier tipo. Mediante este mecenazgo 2.0, en nuestro caso, el espectador de cine participa activamente en la producción de la obra que luego verá, obteniendo a cambio diversas recompensas asignadas según la cuantía de la colaboración.
El agua es un bien que todos damos por común, pero en ciertas zonas, a veces muy cercanas a nosotros, es un bien preciado del que pueden desprenderte en cualquier momento. Hay muchos motivos por lo que esto puede pasar.“El Pequeño Zahorí” se centra en una realidad universal, la sequia y la progresiva desertificación de zonas donde la agricultura es el medio de supervivencia de millones de familias.
Esta situación hacia un éxodo rural hacia otros lugares, es provocado por sequías que impiden cultivar en diversos puntos de nuestra geografía y que convierten el entorno, que antes era el sustento de una familia, en una amenaza para la supervivencia de ésta.
“El Pequeño Zahorí” ha sido producido por AVED, una pequeña productora catalana afincada en Barcelona, cuyo filosofía de producción abraza la creación de productos audiovisuales de temática social y el apoyo a autores emergentes. Para acometer la posproducción de este cortometraje, se influyeron en la metodología de proyectos como “El Cosmonauta” (40.000 euros recaudados por crowdfunding en poco más de un mes), en donde el micromecenazgo por parte de sus futuros espectadores, a la postre gente interesada en las temáticas tratadas en la obra en cuestión, hacían posible la producción de una obra que no solo satisfacía los gustos de dichos espectadores sino que les obsequiaba con extras que les hacían sentir aun más próximos a la creación de la misma, rompiendo así las barreras unidireccionales del modelo clásico creador-espectador.
En este caso, el equipo de “El Pequeño Zahorí” necesita de una suma de 2.200 euros para poder finalizar su posproducción, que incluye grabación de tomas adicionales, creación de la banda de sonido y, por último, composición de una banda sonora que pueda captar los matices de esta historia tan dura como emocionante. Se pueden encontrar más detalles aquí: http://www.lanzanos.com/proyectos/el-pequeno-zahori/
“El Pequeño Zahorí” es un proyecto que puede interesar a varios sectores, tanto a los que sufren el problema de forma directa o indirecta como a los que no son conscientes de ello.