La investigadora española Celia Sànchez Ramos, de la Universidad Complutense de Madrid (UCM), ha logrado el premio a mejor inventora del año 2009 gracias a un filtro ocular que protege la retina de la radiación solar dañina y evita la ceguera.
Si Leonardo da Vinci viviera en la actualidad, tendría una dura competidora por el
premio al mejor invento del año. La doctora en óptica fisiológica y percepción visual de la UCM, Celia Sánchez, no sólo ha obtenido el galardón a la mejor inventora del año 2009, también le han otorgado el premio a la mejor invención en el área sanitaria de la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI). Por si fuera poco, la Oficina Española de Patentes y Marcas le ha concedido la distinción a la mejor patente española. El invento consiste en añadir una protección a las lentillas para eliminar los efectos negativos de la exposición a la luz del sol, lo que evita en último término la ceguera.
El filtro, creado en la UCM, compensa y previene la degeneración de la retina, producida tanto de forma natural como por las operaciones de cataratas. El jurado ha valorado tanto la innovación del invento (no existía ninguna patente de este tipo), como las aplicaciones prácticas y la relevancia para la mejora del bienestar de las personas. A este respecto, el filtro solar es invisible, económico, inocuo, y lo más importante, se puede aplicar a cualquier tipo de lente de contacto, con y sin graduación. Otra característica reseñable es que las lentes de contacto no pierden su invisibilidad y la percepción de los colores no se ve alterada.
Cinco años de investigación española
El equipo de la profesora Sánchez Ramos, del Grupo de Neuro-Computación y Neuro-Robótica, trabajó durante cinco años en investigación con animales y ensayos en humanos hasta lograr la galardonada patente. En primer lugar, estudiaron ratones expuestos a distintos tipos de luz para comprobar qué espectro de luz daña la retina. A partir de ahí, crearon el filtro protector y se comprobó experimentalmente que protege la retina de la luz dañina.
Los premios otorgados por la OMPI son los más prestigiosos que se pueden recibir en el campo de la innovación. En su 37ª edición, más de mil inventos y creadores han competido en las diferentes disciplinas de los galardones.
