Según Ipsos Digital y Celside Insurance, sólo el 33% dispone de teléfono móvil de empresa, aunque el 60% emplea su dispositivo personal para un uso laboral. El 53% considera que podría trabajar en remoto desde su casa y un 32% cree que rendiría más. Para las mujeres, la conciliación es el principal motivo para hacer teletrabajo y para los hombres es la prevención de la salud. El 76% es consciente que el teléfono móvil es portador de agentes infecciosos y por ello intenta limpiarlo
Trabajar en casa y conectarse de forma remota a la oficina es una de las fórmulas que un buen número de empresas está poniendo en práctica siguiendo las recomendaciones de las autoridades para contener la propagación del COVID-19. Según el Estudio de teletrabajo y dispositivos para la conexión, realizado por Ipsos Digital y Celside Insurance, al 36% de los empleados le han planteado este año este método de trabajo, que un 92% de los trabajadores ve con buenos ojos.
El teletrabajo es una práctica cada vez más extendida, gracias, en parte, a las nuevas tecnologías que permiten estar conectado desde cualquier ubicación. El ordenador y el teléfono son las herramientas claves de conexión: el 51% considera que el teléfono es fundamental para comunicarse con su entorno laboral y un 15% lo emplea en sus desplazamientos por trabajo. Sin embargo, solo el 33% dispone de un teléfono de empresa y un 60% acaba empleando su móvil personal para un uso profesional.
Un 32% cree que rendiría más trabajando de forma remota Según los resultados del estudio, el 53% de los encuestados considera que, por la naturaleza de su actividad, podría desarrollar su actividad desde su hogar. De hecho, un 32% considera que su rendimiento sería mayor que en la oficina, para un 54% no habría diferencia y un 15% cree que sería inferior.
En cuanto a la frecuencia de teletrabajar: el 42% de los encuestados optaría por conectarse en remoto entre uno y dos días a la semana, un 14% uno o dos días cada dos semanas y un 37% únicamente iría a la oficina de forma puntual.
Ellas priorizan la conciliación y ellos la salud como motivos para teletrabajar En la actualidad, muchas empresas están activando el teletrabajo debido a las medidas de contención para frenar el COVID-19. Precisamente para la mayoría de los españoles, una de las razones de mayor peso para activar el teletrabajo es minimizar una situación de riesgo como la actual. La conciliación y la inserción de personas con riesgo de exclusión social son otros motivos importantes para ello.
Se observan diferencias entre hombres y mujeres: para ellas la conciliación es el principal motivo para optar al teletrabajo, para un 54% es un motivo de mucha importancia frente al 42% de hombres que le dan la máxima prioridad. Reducir el impacto medioambiental (limitar desplazamientos) es una razón más importante para ellas (44%) que para ellos (36%) La prevención de la salud es otro motivo muy importante para ambos (54 de las mujeres y 53% de los hombres)
La limpieza del móvil, un hábito necesario para su desinfección El 76% de los encuestados afirma ser consciente que el móvil, al estar en contacto con bocas y nariz, es portador de agentes infecciosos, y por ello intenta limpiar su dispositivo. De hecho, un estudio de la Universidad de Barcelona indica que la pantalla del móvil puede contener hasta 30 veces más bacterias que un inodoro.
La limpieza diaria y frecuente es importante, es recomendable pasar un tejido de microfibra (puede ser una toallita similar a la que se emplea para limpiar las gafas) ligeramente humedecido mojado con alcohol disuelto en agua. Para proceder a la limpieza, lo primero es quitarle la funda y limpiar tanto la funda como la pantalla.
Además de la limpieza, es importante no apoyar el móvil boca abajo, no dejarlo sobre superficies de zonas donde se concentran más bacterias como aseos o la cocina y ser precavido y responsable con el uso que se hace.
La encuesta se ha realizado a través de la aplicación IPSOS Digital sobre una muestra de 700 personas de todo el territorio nacional, desde los 18 a los 65 años, entre los que había 50% hombres y 50% mujeres.