El tabaco sigue siendo una gran amenaza social. Un estudio del Ministerio de Sanidad revela que cada año mueren en España 52.000 personas por causas directamente relacionadas con el tabaquismo. Decirle no al tabaco requiere de esfuerzo común e ingenio y eso es lo que propone la red de Clínicas W, que en el Día Mundial Sin Tabaco cambia cepillos por cigarros en una campaña de concienciación por darle la espalda a una de las principales causas de mortalidad en el mundo
La lucha contra el tabaco no sólo comprende a los fumadores. Un estudio reciente de la Organzación Mundial de la Salud (OMS) asegura que, de las más de siete millones de personas que pierden la vida al año en el mundo por el tabaco, cerca de 890.000 son personas no fumadoras expuestas al humo ambiental. En España, las cifras son también alarmantes. Cada año fallecen entre 1500 y 3000 fumadores pasivos por su exposición al humo del tabaco, según Sanidad.
Entre los peligros relacionados con el tabaco, muchos tienen que ver con la salud bucodental. Por ello, Clínicas W promueve un mensaje de concienciación con motivo del Día Mundial Sin Tabaco. La red de clínicas dentales en España, ubicadas en catorce ciudades a nivel nacional y con un método propio, la Odontología Slow, proponen a los fumadores cambiar sus cigarrillos por cepillos dentales. El objetivo es, por un lado, informar a todos de los grandes beneficios que pueden experimentar las personas que dejan de fumar y, por otro, poner un granito de arena en la lucha contra el tabaco.
Cuando se abandona el consumo de tabaco, la salud bucodental del paciente se ve mejorada en muchos aspectos. Por un lado disminuye el riesgo de sufrir periodontitis y otras enfermedades de las encías, así como patologías graves como el cáncer oral. Y es que conviene recordar que los fumadores triplican la probabilidad de sufrir patologías dentales. También facilita la recuperación del olfato y el gusto, sentidos que se ven alterados por el consumo habitual del tabaco y, al dejarlos de consumir, se perciben mejor los olores y se aprecian más los sabores.
El factor estético tiene un significado notable cuando se trata de tabaco y dientes. Renunciar a este hábito nocivo para la salud mejora la estética de la sonrisa, ya que el tabaco provoca manchas amarillas en los dientes haciendo que el paciente se sienta menos cómodo con su sonrisa. Estos problemas que afectan a la felicidad de las personas se afrontan con naturalidad en las clínicas dentales de Odontología Slow. El asesoramiento mientras se abandona el consumo de tabaco es la opción más acertada para obtener los mejores resultados en la salud bucodental.
El grado de concienciación aumenta con iniciativas como la de Clínicas W. Prueba de ello es que la tendencia de exfumadores en España mantiene una línea ascedente, tal como revela un estudio del Ministerio de Sanidad que afirma que un 34.1% de personas se considera exfumadora hoy en día.