Los cristales blindados de última generación son cada vez más eficientes y tienen numerosas aplicaciones
El sector de la cristalería ha sabido mantenerse a lo largo de los años, incluso con la crisis económica, gracias a continuos avances tecnológicos que cumplen con necesidades tanto estéticas como de seguridad.
El cristal blindado, que no se reconoce como tal a simple vista, aporta una doble seguridad. En primer lugar, no supone un peligro para las personas en caso de quebrarse, puesto que, al incluir vidrio templado, sus esquirlas no se esparcen ni proyectan, sino que se quedan pegadas en capas intermedias.
Por otro lado, quizá lo más característico de los cristales blindados, este tipo de cristal es especialmente difícil de ser traspasado tras un impacto. La dureza de las capas de vidrio de seguridad, templadas de forma térmica para aumentar su resistencia, sumada a la elasticidad de la lámina central de burital de polivinilo, que une los dos cristales, absorbe la energía de los golpes.
La capacidad de resistencia del cristal blindado depende de diversos factores, como el tratamiento térmico de los vidrios templados que lo componen y su grosor, así como del tipo de material plástico que los une. De este modo, puede utilizarse en viviendas, como un extra de protección, pero también en vehículos u oficinas que requieran ser a prueba de balas.
Además, estos cristales blindados no están reñidos con el diseño y pueden fabricarse en diversos tamaños y formas, acabados y colores, y con diferentes características energéticas.
En general, la capacidad del cristal de combinarse con el mundo del diseño de interiores es clave para las empresas que se mantienen en la cima. La fabricación de cristales a medida es muy demandada tanto por particulares como por estudios de decoración, que encuentran un aliado en la cristalería de puertas y ventanas.
Igualmente, los cristales decorativos y adaptados a cualquier proyecto de interiorismo, con vidrio fundido, con adornos, con color, pueden combinar estilos y materiales para conseguir resultados para todos los gustos, y son otro ejemplo del esfuerzo del sector de la cristalería por renovarse.