Ante la situación actual, centrada en la búsqueda de una mayor independencia económica y los objetivos de neutralidad climática en 2050, el Parlamento Europeo acaba de aprobar una propuesta para impulsar los combustibles alternativos de aplicación al transporte, en la que se incluyen los gases licuados del petróleo (GLP)

En el momento de inestabilidad económica actual, registrando máximos históricos en el precio de la energía, y con la sociedad cada vez más concienciada con la sostenibilidad y el respeto y cuidado al medio ambiente, la Unión Europea trabaja por alcanzar una mayor independencia energética sin perder de vista los objetivos de neutralidad climática para 2050. En esta línea, el Parlamento Europeo acaba de aprobar un nuevo reglamento para impulsar los combustibles alternativos de aplicación al transporte, en el que se incluyen los gases licuados del petróleo (GLP). La compañía BeGas, pionera en el desarrollo de motores 100% sostenibles propulsados por autogás (GLP) y bioautogás (bioGLP) para vehículos urbanos pesados, celebra la apuesta por este tipo de combustibles que, aunque ya llevan años en el mercado, se posicionan ahora como alternativas económicas y sostenibles a los carburantes tradicionales.

En este contexto, los expertos de BeGas, identifican las claves que convierten el autogás, la denominación que recibe el GLP dedicado a la automoción, en una de las principales alternativas de movilidad en los años siguientes:

Incremento de la demanda de vehículos propulsados por autogás (GLP). Según los datos publicados por la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (ANFAC), a lo largo de 2022 la venta de vehículos propulsados por autogás (GLP) ha aumentado un 19% con respecto al año anterior. Se espera que esta tendencia continue al alza en los próximos meses ya que los principales factores que han contribuido a este aumento (incremento en los precios de los carburantes y la electricidad, además del auge de la movilidad sostenible) se mantendrán en el tiempo. Apuesta por la remotorización del parque de vehículos. Uno de los servicios estrella de BeGas es el denominado ‘retrofit’ para vehículos urbanos pesados, que consiste en la sustitución de motores diésel de entre tres y diez años de vida por otros 100% sostenibles propulsados por autogás (GLP). Una opción que permite a las administraciones públicas y empresas de transporte de viajeros y mercancías, por una moderada inversión, apostar por un combustible más económico y respetuoso con el medio ambiente. Ahorro de costes. El precio del GLP finalizó el mes de septiembre en 1,037€/l., cifra considerablemente menor al coste de otros combustibles tradicionales. Además, el autogás también está incluido en la bonificación de 0,20€ aprobada por el Gobierno, por lo que el ahorro sería aún mayor. Apoyo a la movilidad sostenible. Según la información publicada por el Ministerio para la Transición Ecológica, el sector transporte representa el 25% de las emisiones totales de gases de efecto invernadero en España -de las cuales un 95% provienen de la carretera-. Por eso, su descarbonización es una de las prioridades estatales en el camino a las cero emisiones netas. De este modo, se espera que las ayudas destinadas al fomento de la movilidad sostenible continúen aumentando en los años siguientes.

Así, los motores de BeGas se posicionan como una de las mejores opciones para la descarbonización de las ciudades y los vehículos pesados urbanos, ofreciendo a las administraciones públicas y empresas de transporte de pasajeros y mercancías una alternativa de combustible menos contaminante a precio económico.