Aunque nunca es tarde y se pueden incorporar en garajes y parkings en activo, los expertos en esta materia coinciden en que es fundamental la instalación de estos equipos en los de nueva construcción, para garantizar desde el primer día de actividad la protección de la carrocería de los vehículos y de la estructura del entorno si se da algún descuido en los estacionamientos

Una de las mayores preocupaciones de los conductores llega en el momento de aparcar, especialmente, cuando tienen que maniobrar en espacios reducidos y con diversas barreras en el entorno como son las columnas que suelen estar presentes en los garajes y parkings.

Nunca se pone en duda la pericia de todos los conductores al volante pero siempre puede darse algún descuido que se puede lamentar después; para tranquilizar a los usuarios de estos entornos, Termiser Protecciones considera que la mejor solución consiste en la colocación de elementos de protección para las columnas y paredes de áreas de estacionamiento como estos.

Estos entornos suelen tener columnas que son un verdadero quebradero de cabeza para los conductores que tratan de dejar su vehículo sin ningún rasguño, de ahí que surja la necesidad imperiosa de instalar todas aquellas protecciones adaptadas a la distribución de estos espacios.

Cómo instalar protecciones de parkings y garajes Las empresas dedicadas a este sector, como es el caso de Termiser Protecciones, se encargan de realizar un estudio pormenorizado para asesorar al cliente sobre los elementos que mejor se adaptarían a ese entorno, con elementos estéticos que sintonicen perfectamente con la decoración del resto del ambiente.

Ya no solo es un ahorro en términos de chapa y pintura en el taller cuando se da algún golpe con algún elemento del garaje, sino que se previenen daños en la estructura del mismo.

Se tratan de protectores que se adaptan a cualquier estructura, ya sea una columna cuadrada o redonda y pueden estar fabricados con espuma de poliuretano Ester-AE o reticulado, unos materiales que tienen una gran resistencia a los impactos, gracias al acolchado que incorpora.

También se pueden instalar topes de estacionamiento, que sirven para frenar el vehículo antes de que alcance la pared, evitando daños tanto en la carrocería como en la estructura en la que va incorporado.

En definitiva, nunca está de más instalar estos elementos para proteger la integridad del vehículo y así conseguir un ahorro en facturas del taller de chapa y pintura por posibles contactos del conductor al aparcar.