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Gran éxito de público y críticas al espectáculo de teatro musical EL MERCADO GRANDE producido íntegramente por la Coral la Espadaña de Ayllón en Segovia

Los retos que se plantea la Coral la Espadaña de Ayllón están siempre en busca de la motivación del colectivo. En esta ocasión, nos encontramos con un proyecto que rompe los esquemas de cualquier agrupación coral al uso, y que para la Espadaña de Ayllón no es novedad, puesto que en el año 2016 llevó a cabo el montaje teatral LA TABERNA . Habiendo sido capaces de interpretar obras contemporáneas de hasta ocho voces, con obras de gran dificultad armónica, en esta ocasión se han planteado, con gran éxito de público y críticas la interpretación del MERCADO GRANDE, una obra de creación propia que integra la música vocal del renacimiento y del folclore tradicional segoviano, con la historia de los mercados de la época, junto con historias que emocionan y atrapan al espectador. Cada uno de los miembros de la coral, un total de 32 participantes, tiene una responsabilidad y un lugar en dicho proyecto. Actores, músicos, cantantes, diseño de folleto y cartelería, técnicos de luces y sonido, vestuario, escenografía, atrezzo y difusión, entre otros, son íntegramente asumidos por la asociación. Con el aforo completo en su estreno, en la celebración de la famosa fiesta de AYLLÓN MEDIEVAL, se realizarán tres representaciones el fin de semana 3, 4 y 5 de agosto, con un aforo limitado, en el enclave único de la Iglesia de San Miguel a las 21 horas. El reto de EL MERCADO GRANDE de producción propia con la dirección musical y arreglos de muchas de las obras de mano del director segoviano Rubén Cid y los guiones y dirección escénica de Mariana Sanz, ha hecho dar al colectivo un paso más hacia la interpretación, que aunque no sea el objetivo principal y cotidiano de la coral, abre su punto de miras hacia nuevas artes. La Coral la Espadaña, activa durante todo el año, alimenta la cultura musical de todo el Nordeste de Segovia, con participantes de distintos lugares como son Riaza, Campo de San Pedro o Fresno de Cantespino. Su repertorio, a lo largo del año, es muy variado y en ocasiones complicado, trabajando de modo constante para conseguir resultados de gran valor.