La lucha de los consumidores empieza a dar frutos. Tras semanas de silencio y confusión, Volkswagen empieza a desvelar cómo pretende salir del atolladero en el que se metió al trucar más de 11 millones de motores en todo el mundo.
El truco consiste en un software que hace fingir al motor cuando es sometido a una prueba concreta de emisiones contaminantes. De esta manera, 700.000 vehículos fueron vendidos en España cuando en realidad superaban los límites de NOx.
El fabricante alemán asegura que la solución es sencilla:
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desinstalar el software (en realidad instalar una actualización): lleva como mucho media hora y es lo único que se hará en los motores 2.0 TDI.
- instalar un transformador de corriente: lleva otra media hora y será necesario en los motores 1.6 TDI.
En total, entre media hora y una hora en el taller según el coche.
Volkswagen asegura que de esta manera saldrá del entuerto en que se ha metido, ya que:
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se cumplirá la normativa sobre emisiones contaminantes.
- ni el rendimiento ni el consumo del coche se verán alterados.
La gran operación empezará en enero de 2016 y consistirá en llamar a todos los conductores afectados, poniendo facilidades para que no tengan ningún problema de desplazamiento hasta el taller indicado. Esta es la solución planteada por Volkswagen. Queda pendiente que el resto de marcas afectadas (Audi, Seat, Skoda y Volkswagen Vehículos Comerciales) proponga algo parecido. Y también aclarar las "irregularidades" en las emisiones de CO2 de alrededor de 50.000 vehículos Volkswagen vendidos en España.
OCU continúa su lucha
Desde el primer momento hemos exigido transparencia y reacción, tanto a Volkswagen como al Ministerio de Industria y Energía. Hemos presentado denuncia ante las autoridades de Consumo y hemos criticado la complacencia de Europa ante este escándalo. En Estados Unidos los conductores van a ser compensados económicamente y en Europa no.
Esto no se acaba aquí. Seguimos trabajando a todos los niveles y tu apoyo se ha demostrado fundamental para meter presión: