Irreverente, iconoclasta, ácrata y con un estilo socarrón e irónico muy peculiar que marcaba sus canciones, Javier Krahe de Salas (Madrid, 1944) había compuesto más de 150 canciones y contaba con catorce discos en el mercado. El último de ellos en 2013, un trabajo titulado Las diez de últimas que el músico interpretaba en locales de conciertos de pequeño formato.
Miembro de la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE), donde tenía registrados sus temas, el éxito le llegó con La Mandrágora (1981), un álbum que firmó con Joaquín Sabina y Alberto Pérez.
Autor de temas inolvidables como La hoguera, El vicio en el hospicio, El cromosoma o El cuervo ingenuo, fundó su propio sello discográfico 18 chulos, con el propósito de publicar su propia música y la de sus amigos (El Gran Wyoming, Pepín Tre, Santiago Segura, Faemino y Pablo Carbonell).
En septiembre de 2012, asistió al 60 Festival de Cine de San Sebastián para la proyección de Esta no es la vida privada de Javier Krahe, de Ana Murugarren y Joaquín Trincado. Una película que cuenta con la coproducción de la SGAE, a través de su Fundación.
Los autores y editores de la SGAE lamentan tan sensible pérdida y se unen al dolor de su familia y allegados en estos difíciles momentos.
Los restos mortales del cantautor serán trasladados el próximo martes al Tanatorio de la M-30 de Madrid, según informa la Agencia EFE.