¿Sus armas secretas? Su torsen, su par máximo de 300 Nm, sus 208 CV de potencia o sus pinzas de freno rojas Brembo by Peugeot Sport. En 2014 se cumplen tres décadas del nacimiento del mito: el Peugeot 205 GTi. Para conmemorarlo, Peugeot presenta el 208 GTi 30th, una edición especial limitada a mil unidades y que está desarrollada por Peugeot Sport.
Cada uno de estos GTi se trata de forma individual y se prueba en el circuito. Y es que es ahí en donde este modelo se muestra radical gracias a elementos como sus 208 CV de potencia, su par máximo de 300 Nm disponibles desde las 1.700 RPM, su caja de cambios de seis velocidades con un recorrido corto y preciso o su Torsen. Una combinación ganadora para dar lugar a un comportamiento dinámico espectacular. Tan importante como avanzar es parar; por ello, el Peugeot 208 GTi 30th cuenta con un sistema de frenado en el que destacan las pinzas rojas Brembo firmadas por Peugeot Sport .Además, su aspecto racing es impresionante: desde sus colores (tanto los unitonos como el bitono), pasando por los asientos tipo bacquet o hasta los detalles como las alfombrillas rojas o su altura libre rebajada al suelo, todo en él rezuma radicalidad. Pero, además, el 208 GTi 30th es un deportivo racional. Prueba de ello es que equipa el sistema Stop & Start, con lo que registra emisiones de 125 g/km de CO2 y se puede acoger al Plan PIVE.
Un desarrollo y puesta a punto made in Peugeot Sport El Peugeot 208 GTi 30th nace en la línea de transformación de Peugeot Sport. Allí, cada vehículo se trata de forma individual con un equipo formado por 14 profesionales en un total de 26 horas de trabajo. Este proceso se divide en cuatro fases. En la primera se recibe un 208 GTi de serie, que se identifica y se prepara un dossier para seguir las transformaciones que se hagan en el mismo. La segunda fase está dedicada a la mecánica: se ensancha la parte delantera reemplazando los triángulos inferiores delanteros y las estabilizadoras son más finas, ligeras pero más rígidas. Se modifican las caídas en ambos trenes, con mayor divergencia en el delantero y convergencia en el trasero”.
En la tercera se lleva a cabo el pintado y, para ello, se desmontan ciertos elementos. Por último, se produce el montaje de los elementos exteriores, se colocan los pasos de rueda, el difusor trasero, la calandra o el juego de faros antiniebla. Antes de ser entregado a cada cliente cada vehículo se controla individualmente para garantizar un nivel de calidad óptimo. Se realiza un análisis de aspectos exteriores, interiores, un control y una prueba para comprobar el comportamiento del coche.