- La resistencia aerodinámica se reduce hasta un 10% rebajando el consumo en un 5%.
- La parrilla frontal activa permite una alta eficiencia en condiciones normales de conducción.
Rüsselsheim/Aquisgrán/Madrid. Opel mejora continuamente la eficiencia de sus vehículos de propulsión convencional con lo que también reduce las emisiones de CO2 de toda su flota. El siguiente paso de esta estrategia es el desarrollo de un innovador sistema de deflectores frontales activos. Michael Ableson, portavoz del Consejo de Dirección de Adam Opel AG y vicepresidente de Ingeniería de Vehículos de GM Europe, ha presentado este sistema en el Coloquio de Aquisgrán (Alemania), el mayor congreso de tecnología de automoción y motores en Europa.
“Estamos muy comprometidos con la reducción de las emisiones de CO2. Los coches eléctricos son parte de esa solución, sin embargo, en vez de centrarnos en una sola solución, nuestro objetivo es cumplir con nuestra responsabilidad de proteger el clima y satisfacer a los clientes en este sentido brindándoles un abanico de soluciones tecnológicas más asequibles” subrayó Ableson.
Una de las tecnologías que están bajo desarrollo en Opel es la evolución del llamado deflector aerodinámico en las entradas de aire frontales. Estos deflectores activos mejoran la eficiencia energética cerrándose cuando no es necesaria la refrigeración mediante el aire. Cuando está cerrado, el sistema de deflectores mejora el rendimiento aerodinámico redirigiendo el flujo de aire alrededor de la parte delantera del vehículo y por los lados, en lugar de a través del compartimiento del motor que aerodinámicamente es menos eficiente. El deflector está abierto o cerrado dependiendo de la temperatura del refrigerante del motor y la velocidad. Por ejemplo, el deflector se abre cuando el coche circula por una carretera de montaña o en conducción urbana cuando el calor lo requiere, por otra parte, el deflector se cierra a altas velocidades cuando se requiere menos refrigeración aerodinámica del motor.
Mientras que la mayoría de vehículos actuales tienen el frontal permanentemente abierto, Opel ya había equipado en 2010 a la versión ecoFLEX del Astra un deflector aerodinámico parcialmente activo que permitió reducir sus emisiones de CO2 hasta los 99 gr/km. Opel también equipó con esta tecnología a otros vehículos de su gama, como el Insignia o el Zafira Tourer.
Combinando factores aerodinámicos, térmicos y eléctricos, el control inteligente del sistema controla la apertura y el cierre tanto de la parte superior como inferior de la parrilla, incluso cada una de forma independiente, y puede mejorar la eficiencia de la conducción en condiciones cotidianas. Por ejemplo, el principal beneficio de mejorar la aerodinámica del coche es que la resistencia al aire puede reducirse en hasta un 10%, que consecuentemente repercute en la reducción del consumo de carburante en alrededor de un 2% en el NEDC (nuevo ciclo de conducción europea) o en un 5% cuando se conduce a unos 130 km/h.
El sistema de deflectores activos también tiene ventajas térmicas ya que permite reducir el enfriamiento del motor cuando este se apaga o bien reducir el tiempo de calentamiento del motor cuando éste está frío, lo que mejora directamente el consumo de combustible y la climatización interior sobre todo en días fríos.
“El frontal con deflectores activos encarna perfectamente el carácter emocionante, alemán y asequible de nuestra marca” expuso Martin Holzhofer, director del Centro de Ingeniería de CO2 de Opel. “Es la primera de una serie de nuevas tecnologías altamente eficientes y asequibles con las cuales conseguiremos reducir las emisiones y el consumo en nuestros futuros vehículos”, afirmó.
A pesar de la aparente simpleza y lógica de esta solución, el sistema de deflectores frontales activos representa un gran reto para ingenieros y diseñadores: tienen que tener en cuenta numerosos factores, donde no sólo se incluye el diseño, la arquitectura y la protección a peatones, si no también a las calificaciones de los seguros, los diferentes tipos de motores y transmisiones con sus respectivas condiciones térmicas y, por supuesto, las necesidades en materia de refrigeración.
Opel planea equipar su primer sistema frontal de deflectores activos en un corto plazo, en un modelo completamente nuevo. El despliegue de las nuevas tecnologías adicionales respetuosas con el medioambiente seguirá su estela.