Desde hoy tenemos un nuevo ídolo, el profesor Roger Bowley, emérito de Física en la Universidad de Nottingham. Y es que este señor ha realizado un vídeo espectacular para demostrar que se puede abrir la cerradura de un coche incluso cuando nuestra llave o mando no funcionan por encontrarnos demasiado lejos del vehículo. Bowley obra su magia usando el cerebro, literalmente, y una garrafa de agua.
Roger Bowley expone un problema común: olvidar dónde hemos aparcado el coche y tener que recorrer todo el aparcamiento del supermercado mando en ristre para rastrearlo mientras apretamos el botón una y otra vez en busca de las lucecitas salvadoras. Lo resuelve de forma brillante. ¿Su base? Un vídeo de ‘Top Gear’, el programa sobre la cultura del automóvil que triunfa en medio mundo, en el que demostraban que el rango de alcance de las llaves convencionales aumentaba sensiblemente si entraban en contacto con nuestra cabeza a la hora de accionar el botón de apertura.
Según el físico, la razón por la que la llave aumenta su potencia al entrar en contacto con nuestra cabeza reside en que el cerebro de cualquier humano está compuesto de agua en tres cuartas partes. Es el agua la que amplifica el alcance de las ondas electromagnéticas que comunican el mando con el sistema electrónico de apertura del vehículo. “Cuando las ondas electromagnéticas entran en el agua, el campo eléctrico mueve los electrones arriba y abajo haciendo que todo se comporte como un transmisor de radio”, explica.
Curioso, impresionantey útil. ¿No crees?