El coordinador federal de Izquierda Unida, Cayo Lara, llevará a la sesión de control al Gobierno del Congreso del próximo miércoles el conflicto de Coca-Cola. Lara ha cambiado hoy la pregunta dirigida a los miembros del Ejecutivo -tal y como permite el Reglamento de la Cámara y los acuerdos al respecto de la Junta de Portavoces- y ha registrado el siguiente texto dirigido a la ministra de Empleo y Seguridad Social, Fátima Báñez: “¿Qué opina el Gobierno de los distintos actos de apoyo a los trabajadores de Coca-Cola Iberian Partners realizados este fin de semana rechazando los despidos que ocasionará un ERE de una empresa con altos beneficios en los últimos años?”
De esta forma, el presidente portavoz del Grupo Parlamentario de IU, ICV-EUiA, CHA incluye este tema de máxima actualidad en el debate parlamentario y aplaza para una sesión a la que sí acuda el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, la pregunta sobre la creación de una comisión de investigación sobre los responsables de la quiebra de las cajas de ahorro. Se da la circunstancia de que esta última es la cuestión que se negó a responder en enero la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, y derivó al ministro de Economía, Luis de Guindos, sabiendo que este no podía contestarla por encontrarse fuera de España.
Cayo Lara denunció esta mañana en rueda de prensa que el único objetivo de la empresa en este conflicto es “aumentar sus beneficios”, pese a que tiene una “línea constante” de beneficios, que entre 2010 y 2012 fue de 860,9 millones.
Aseguró que no existe “ninguna justificación” para los despidos y exigió al Gobierno del PP que “actúe con la misma rapidez” que ha demostrado en otros conflictos, como hizo recientemente en el que afecta a Sacyr en relación a la ampliación del Canal de Panamá.
El máximo responsable de IU indicó que si se permiten casos como el de Coca-Cola “no es posible recuperar el empleo en España”, al tiempo que recordó que los argumentos esgrimidos por la empresa, además de estar incluidos en la reforma laboral impuesta por el PP en 2012, ya estaban presentes en la reforma de 2010 del Ejecutivo socialista, que abría aún más la puerta a las compañías a despedir trabajadores por causas económicas, técnicas u organizativas.
“La reforma laboral del PP –explicó- recogió esta disposición y, además, incorporó una nueva para recoger los despidos en empresas con pérdidas durante tres trimestres”. Insistió en que Izquierda Unida “estará junto a los trabajadores en su resistencia plena” a los despidos.
(En la foto, de M.Asenjo, Cayo Lara en rueda de prensa en la sede federal de IU)
