Nacida en una exótica región llamada La Guajira al norte de Colombia, en la que conviven día a día los miembros de una de las etnias indígenas más grandes de América Latina, los Wayúu; con una población mestiza formada por colombianos con ancestros españoles, franceses, italianos y de muchas otras procedencias, llegó a España hace 12 años con la idea de estudiar Arte Dramático y conocer la patria de Lorca y de Calderón.
¿Cómo es el paso de vivir en La Guajira a estar en una ciudad como Madrid?
La Guajira es casi un desierto imponente rodeado de mar, con pequeñas ciudades y pueblos en los que casi todo el mundo se conoce. Afortunadamente tuve la oportunidad de estudiar en Bogotá unos años antes de llegar a Madrid, es un cambio brusco, es como tener dos vidas que difícilmente pueden encajarse.
¿Por qué decidió venir a España?
Había leído mucho sobre este país, me atraía antes de conocerlo, al principio tenía dudas entre Madrid y Barcelona pero en Madrid me sentí francamente bien en ese momento y descarté la opción de probar otra ciudad, ahora me arrepiento un poco de no haber probado Barcelona, pero amo Madrid, ya es mi ciudad.
¿Cómo decidió dedicarse al teatro?
Realmente en La Guajira no había posibilidad de ver teatro, más que alguna vez al año que un grupo que estaba perdido de paso representaba alguna obra en el centro cultural, yo llegué al teatro por la literatura, Calderón de La Barca me inspiró desde la adolescencia, Lorca, Galdós, Valle Inclán e incluso Tirso de Molina a quien leí por esos años también. La decisión la tomé en Bogotá la primera vez que asistí al Festival Iberoamericano organizado por Fanny Mickey, fue inmediato, en ese momento supe que era lo que quería hacer.
¿Qué opinaba su familia?
Mi madre dice que del arte sólo sabe que tiene una hija artista y nada más, ellos vinieron a verme cuando trabajé en la CNTC y mi madre ha estado de gira en una de mis producciones La Fiesta de los Jueces, no opinan pero están orgullosos de que haga algo que me apasiona y me hace feliz.
¿Usted llegó a Madrid con el boom de la inmigración, se ha planteado volver a Colombia ahora que las cosas no van del todo bien aquí?
No vine a Madrid por el “boom”, vine porque era un viaje que tenía que hacer y si algún día decido marcharme no será por una crisis en la que no creo. La única crisis es la de la ambición desmesurada y la de nuestra incapacidad de amar a nuestros semejantes, tarde o temprano tendremos que aprender a convivir, esta “crisis” no está en España, moverse de país no hará que el problema desaparezca. Desde luego que quiero desarrollar proyectos en Colombia, deseo fervientemente tener esa oportunidad, pero nunca abandonaré España, yo ya tengo dos países y en los dos quiero estar.
¿En qué proyectos está trabajando actualmente?
Estoy en las últimas funciones de Doña Perfecta de Benito Pérez Galdós con la que he estado dos temporadas en el Teatro María Guerrero, además estoy dirigiendo mi segundo montaje, todavía no quiero anunciar el título porque estamos en fase de prueba, es un proyecto de la compañía Primas de Riesgo y además he empezado a crear junto a ellas una plataforma de trabajo con la que ya hemos tenido encuentros con profesionales de mi sector, queremos trabajar para encontrar soluciones, alejados del run run político y centrados en hacer iniciativas sostenibles e independientes. Voy a hacer publicidad de nuestra web por si alguien quiere conocer el proyecto. www.primasderiesgo.com
¿Algún mensaje para los inmigrantes que viven en España?
Que vayan al teatro, lo hacemos también para ellos. Eso me llenaría de ilusión.