El monumento registra 210 visitas pese a una climatología desapacible
El Puente Bizkaia duplicó el pasado domingo el número de visitantes con el evento de Social Travel #PuenteDeEmociones. En total, 210 personas visitaron la pasarela a lo largo de la mañana, una cifra que supera ampliamente los promedios de los domingos en esta mitad del año. La jornada se completó con el descenso de tirolina, una modalidad urbana de deporte aventura que reunió a 50 niños. El reclamo de la visita gratuita a la pasarela se impuso a una jornada gris de temperaturas cercanas al invierno. El evento tuvo especial acogida en las horas finales cuando se registraron colas para acceder a la visita. La tirolina, el otro gran atractivo de la jornada, causó sensación entre niños y mayores ante la espectacularidad de la instalación. El itinerario partía de una base en uno de los pilares del puente a 10 metros de altura y recorría un centenar de metros hasta alcanzar tierra en pleno paseo de la ría. La tirolina fue una pequeña aventura para los participantes, todos ellos menores de 15 años, lo que hizo repetir a la mayoría. Los pequeños utilizaron un acceso interno del puente a través de la escalera de hierro para llegar al punto de salida. La actividad contó con todas las medidas de seguridad que incluían arnes de protección y casco. #PuenteDeEmociones transmitió a la comunidad internauta y a la población local la admiración por el Puente Bizkaia, un patrimonio mundial que constituye uno de los íconos de la ría de Bilbao. El monumento causó sensación hace 120 años al ser el primer puente de estas características en el mundo. La construcción incorporó importantes avances técnicos para comunicar ambas márgenes de la ría sin bloquear el tráfico naval. Para ello se empleó una máquina de vapor desplazar la barquilla suspendida por cables sobre la ría.