Si cuando acabó la temporada de verano optaste por el invernaje de tu piscina, es muy importante que no descuides esta tarea durante el invierno para mantener el agua en condiciones óptimas hasta que llegue el momento de ponerla en marcha de nuevo.

El invernaje de la piscina, sin duda la opción más ecológica y la menos costosa para tu bolsillo, suele durar unos ocho meses, desde que termina el verano hasta que la temperatura del agua sobrepasa los 15 grados, momento en el que deberás reanudar los cuidados habituales de la época estival.

Anteriormente, exponíamos los pasos básicos a seguir para un correcto invernaje de la pisicina:

Limpieza de las paredes y el fondo de la piscina. Limpieza del filtro. Medición y ajuste del pH entre 7 y 7,4. Cloración de choque para eliminar suciedad, algas, impurezas… Aplicación del invernador para reducir la aparición de algas y sales cálcicas durante el invierno. Cobertura de la piscina para proteger el agua de materia orgánica y agentes atmosféricos. La aplicación del invernador debe realizarse dos veces durante el proceso de invernaje, cuando finaliza el verano y a la mitad de la temporada invernal, entre los meses de enero y febrero.

Siguiendo estos cuidados habrás iniciado correctamente el proceso de invernaje de tu piscina, pero es necesario que, cada dos semanas aproximadamente, tengas en cuenta una serie de cuidados:

Comprobar el buen funcionamiento del sistema de filtración. Para ello será suficiente con que pongas en marcha el filtro de la piscina durante 2 o 3 horas y con esto evitarás obstrucciones en la bomba de filtro cuando llegue el verano. En caso de que no hayas cubierto la piscina, es muy recomendable que regularmente vayas retirando con un recogehojas todos los elementos que caigan sobre la superficie, como hojas, insectos, arena…, e incluso puedes aprovechar alguna ocasión para poner en marcha el limpiafondos. Como ya hemos comentado, es realmente importante que apliquemos de nuevo un producto invernador entre los meses de enero y febrero. A partir de la llegada de la primavera, deberás vigilar la temperatura del agua. Cuando supere los 15 grados se recomienda iniciar los cuidados habituales que realizamos durante el verano.

Algunas recomendaciones generales:

Reducir cantidad de cloro durante este periodo. Funcionamiento de la depuradora 8 horas semanales aproximadamente. Vigilar que la superficie no acumule demasiados residuos como hojas, insectos, etc.

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