Artículo con una serie de consejos para el mantenimiento de tu calefacción, en función del sistema que utilice.

En pleno invierno, la calefacción alcanza su más alto rendimiento, siendo importante que cuidemos su mantenimiento, sea cual sea el sistema que usemos, para que funcionen correctamente y alargar al máximo la vida útil del aparato.

En función del sistema de calefacción que tengas en casa, debes tener en cuenta algunos consejos básicos para un adecuado mantenimiento.

Sistemas de calefacción

Chimeneas de bioetanol:  Su mantenimiento se reduce prácticamente a recargar el bioetanol. Al no producir humo, hollín u olores, no necesita ningún cuidado específico de limpieza. El exterior puede limpiarse con un paño o un plumero para retirar el polvo, siendo desaconsejable siempre el uso de productos abrasivos.

 

Calefacción eléctrica: Uno de los mayores beneficios de la calefacción eléctrica es el bajo mantenimiento que requiere, aunque es aconsejable mantener limpio tanto el emisor como el suelo donde se encuentra instalado. Para su limpieza solo debes asegurarte de apagar el interruptor, desenchufar el aparato y usar un paño humedecido con un poco de agua, no siendo recomendable el uso de productos abrasivos. Estufas de gas:  Casi no necesitan mantenimiento. El exterior de la estufa puede limpiarse con un paño húmedo, siempre que la estufa esté apagada, no siendo recomendable limpiarla mientras permanezca caliente.

 

Estufas de leña:  Se recomienda como mínimo una limpieza a fondo antes de comenzar la temporada de invierno, siendo muy importante revisar el conducto de humo para asegurarte de que no tenga ninguna avería que obstaculice la salida. Aunque la tarea de deshollinado puede parecer muy sencilla, es recomendable que se encargue un especialista. Para el interior, al retirar la ceniza, puedes dejar una capa de 3 o 4 cm que te permitirá consumir algo menos de leña. Puedes ayudarte de algún quitahollín específico para estufas de leña y de palas y escobillas.

 

En cuanto al mantenimiento del exterior de la chimenea, hay productos específicos para la limpieza del cristal, apto para estufas, hogares e insterts, y no debes usar productos abrasivos, bastará con un paño humedecido.

 

Estufas de parafina: Cuando acabe el invierno, debes dejar que el combustible se consuma completamente. Se recomienda cambiar la mecha de las estufas cada temporada para disminuir la contaminación y los olores. Cada vez que llenes el depósito es aconsejable que seques los restos con un paño de tela o papel.

 

Estufas de pellets: Es suficiente con que limpies el aparato al final de cada temporada. Debido a que los pellets tienen buena combustión y no producen mucha cantidad de cenizas, suele bastar con que las retires una vez a la semana. Para esta tarea resultan muy prácticos los aspiradores de cenizas.

 

En el caso de la calefacción portátil, en general, es muy recomendable limpiar y guardar los aparatos convenientemente protegidos del polvo y la humedad al final de la temporada de invierno.

Encuentra todo lo que necesitas para el mantenimiento de tu calefacción en nuestro catálogo online de productos. (Enlace a http://catalogo.aki.es/accesorios-de-estufas-y-chimeneas)