El uso del césped artificial se extiende cada vez más al ámbito del hogar, ya que su composición, mezcla de materiales sintéticos y plásticos, hace que se asemeje al césped natural pero sin el elevado coste de recursos y mantenimiento que este último requiere.
El césped artificial, por tanto, es una es una excelente alternativa al natural, pues se trata de tu tipo de césped mucho más económico y ecológico.
Su funcionalidad y practicidad, así como la resistencia que presenta al paso del tiempo, son algunas de las principales características que definen el césped artificial. Esta tipología de césped te ofrece numerosas ventajas, como:
- Ahorro en el consumo de agua. No necesita sistema de riego.
- Bajo coste de mantenimiento: no es necesario abonar, fumigar o segar y tampoco genera residuos. Evita las malas hierbas.
- Confort: tacto suave y fresco. A mayor densidad más confortable.
- Resistente: a las condiciones climáticas (no se hiela ni se seca). Resistente a aguas cloradas de piscinas.
- Seguro: es ignífugo.
- Estético: césped perfecto todo el año ya que mantiene el color verde y no se hacen calvas.
- Apto para zonas sombreadas o donde no hay luz solar.
- Efecto memoria: se puede pisar o poner muebles encima sin que se deteriore su aspecto. Las fibras vuelven a su estado original (según el modelo).
Todas estas ventajas hacen que el césped artificial pueda emplearse como un elemento más de la decoración de jardines. Permite la personalización e incluso diferentes colores. Además, resulta agradable a la pisada, es confortable y su aspecto muy realista.
Un césped artificial de gama alta puede ser difícil de diferenciar del césped natural una vez instalado. La calidad del césped artificial se define por:
- Material, tiene más calidad a mayor peso (densidad) y será más confortable.
- Altura, siendo mejor cuando aumenta su altura.
- Resistencia al tránsito, que esté compuesto por materiales con “efecto memoria” permitirá que recupere antes su forma después de pisarlo.
En cuanto a su composición, los elementos que suelen usarse con más frecuencia para la elaboración del césped artificial son el polipropileno y el polietileno. Estos materiales hacen que la composición de fibras mixtas y ultrafinas resultantes les dé un aspecto natural y suave al tacto.
Ahora bien, un buen cuidado resulta primordial en este tipo de césped, pues debe ser higiénico, seguro, estético, duradero y de calidad. Para el correcto mantenimiento del césped artificial es recomendable que realices al menos un cepillado anual de de la superficie.
Además, debes tener en cuenta los siguientes cuidados mensuales:
- Barrido para eliminar el polvo, tierra o pelos de animales.
- Limpieza con agua de las zonas que se han ensuciado a consecuencia de barro, etc.
- Regado general para eliminar el polvo y refrescar la superficie.