Algunas averías eléctricas en el hogar son consecuencia de la concentración de picos de tensión que pueden ocasionar daños en los dispositivos, así como riesgos físicos en forma de descargas eléctricas o incendios en el caso de que las instalaciones no sean las correctas
Aunque ya nadie se imagina su día a día sin electricidad que alimente los aparatos domésticos de la cocina, salón, baño o habitaciones, hay que poner especial atención en las averías que se pueden ocasionar. La mayor parte de los accidentes que se producen son consecuencia del deterioro de las instalaciones por el paso del tiempo, de un mal uso de los dispositivos del hogar y, en ocasiones, de la sobrecarga y los picos de tensión acumulados, que pueden llegar no solo a dañar los electrodomésticos y otros aparatos de la casa sino, incluso, originar descargas eléctricas o incendios con posibles daños físicos para las personas.
Mantener las instalaciones en buen funcionamiento o enfrentarse a determinadas averías de este estilo son tareas imprescindibles que no todo el mundo sabe cómo llevar a cabo por falta de conocimiento. Reparalia (www.reparalia.es), empresa especializada en la comercialización de contratos de cuidado del hogar, y experta en reparaciones y gestión de siniestros, ofrece una serie de consideraciones a la hora de prevenir este tipo de fallos:
Causas y consecuencias de los fallos eléctricos.
Con frecuencia, los fallos eléctricos se producen por problemas de subidas y bajadas de tensión, originados por condiciones atmosféricas adversas (tormentas, nevadas, rachas de viento). Por ejemplo, la corriente generada por un rayo típico o una tormenta eléctrica son sobrecargas que los equipos electrónicos y otros aparatos del hogar no son capaces de asumir, y por lo tanto acaban dañándose. Asimismo, otra de las principales causas de la aparición de averías en la red eléctrica viene dada por la existencia de unas instalaciones deterioradas. En este sentido, procura que sean revisadas periódicamente.
Electrodomésticos a prueba de averías eléctricas. Recomendaciones:
Conoce los dispositivos más sensibles. Los fallos eléctricos afectan en mayor medida a aquellos que están en modo LED (luz de encendido en rojo). Es el caso de la televisión, el descodificador TDT, videoconsolas, la placa de la caldera, el lector de DVD… Asimismo, también pueden verse afectados aquellos que estén conectados de forma constante a una fuente de alimentación. Es el caso de los ordenadores, la lavadora o el frigorífico. Procura estar especialmente atento a los aparatos más sensibles cuando se den fenómenos meteorológicos adversos (tormentas, grandes nevadas, rachas de viento fuerte…). En esos momentos lo mejor es desconectarlos, no siendo suficiente con apagarlos ya que la subida de tensión entraría por los cables conectados destruyendo la fuente y cuantos componentes pueda alcanzar en su camino. Gran parte de los cortocircuitos se producen por alteraciones producidas por equipos conectados en la misma red. Mantener apagados y desenchufados de su fuente de alimentación todos los dispositivos que no estén en uso. Con esta medida, evitamos averías y ahorramos en el consumo de electricidad. En este sentido, es recomendable usar una regleta donde mantener enchufados los dispositivos, de modo que podamos desconectarlos de la luz apagando el interruptor de la regleta.Dispositivos que ayudan a controlar los picos de tensión:
Tener un diferencial en el cuadro eléctrico es un medio muy eficaz de asegurar la protección contra los riesgos de contacto directo o indirecto, ya que detectan las fugas de corriente e interrumpe el circuito. A la hora de elegir el diferencial, hay que tener en cuenta las características de cada modelo para ver el que mejor se ajusta a las necesidades de tu vivienda. Su instalación debe ser realizada siempre por un profesional Si por cualquier motivo el equipo necesita estar siempre funcionando o conectado podemos utilizar un limitador de tensión o un SAI (Sistema de Alimentación Ininterrumpido). Es un circuito que permite, mediante el uso de resistencias y diodos, eliminar tensiones que no nos interesa que lleguen a un determinado punto de la instalación. Por tu seguridad no intentes arreglar tú solo las reparaciones complejas, déjaselo a un profesional.
Para solucionar las averías eléctricas es recomendable estar protegidos con algún tipo de contrato del hogar. Por una cuota anual de 65,37€, Reparalia ofrece el producto Electricidad Total, con el que estarás cubierto ante cualquier avería de tu instalación eléctrica (enchufes, timbres, interruptores…)