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En este Día Internacional de la Tierra cambia los hábitos de consumo energético y súmate a los esfuerzos para cuidar de nuestro medio ambiente

¿Querés cambiar hacia las nuevas tecnologías, pero te confunde la gama de opciones en iluminación que encontras hoy en día?  Este 22 de abril es el día ideal para que te sumes a la estrategia mundial del cuidado del medio ambiente adoptando prácticas sencillas de iluminación que contribuyen a la salud del planeta y te generarán ahorros sustanciales en tu gasto de energía eléctrica.  Esto es posible gracias a la nueva generación de lámparas que, utilizando menos electricidad, ofrecen el mismo nivel de luminosidad que otorgan las tradicionales.

Para navegar en esta nueva era en iluminación y desarrollar prácticas de consumo y criterios de compra que resulten beneficiosos para el planeta y la economía familiar, te explicamos algunos conceptos que te ayudarán a escoger la lámpara ideal para cada lugar y tarea.

Entendiendo las nuevas tecnologías El 90% de la energía consumida por las lamparitas incandescentes tradicionales se transforma en calor, mientras que apenas un 10% genera luz. Asimismo, un foco incandescente dura en promedio apenas mil horas o cerca de un año. Por estas razones son considerados ineficientes. El cambio hacia tecnologías más eficientes puede representar ahorros de 50% a 75% en el consumo de la energía destinada a iluminación de una residencia común, porque además de consumir menos energía, duran mucho más. Si comparamos una lámpara incandescente común con por ejemplo la lámpara LED de GE Energy Smart®, la LED dura hasta 33 veces más. Para el uso general en los hogares, iluminación de tareas y espacios de trabajo, podemos considerar tres tecnologías: fluorescente, LED (diodos emisores de luz) y halógena (incandescentes ahorradoras)

1. Fluorescente: en comparación con las lamparitas comunes, los focos ahorradores brindan un ahorro energético entre 75 y 80% y duran hasta 10 veces más – 8 a 10 años tomando como base un uso diario promedio de 3 horas, y el abastecimiento de una red energética estable. 2. LED: estos sistemas ofrecen un ahorro energético de hasta 80% frente a las bombillas incandescentes tradicionales y tienen una vida útil de hasta 25 mil horas, es decir, hasta 22 años. 3. Halógena: también conocidas como “halógenas incandescentes”, usan 25% menos electricidad y duran hasta tres veces más que una incandescente tradicional. 

Tu diccionario para las compras Hace algunos años, la compra de lámparas se definía  solamente por la cantidad de watts consumidos (40, 60, 75 y 100 watts). Hoy en día, la iluminación puede cambiar completamente la atmosfera de un ambiente, destacando obras de arte, ofreciendo más confort en la realización de tareas y hasta estimulando la productividad. Como varios factores influyen en  el  desempeño de los focos, antes de comprar es importante entender los siguientes términos: 

1. Lúmenes: Lúmenes son los nuevos “watts”. Los lúmenes indican la cantidad de luz generada, es decir, cuanto más lúmenes, mayor el nivel de iluminación. Por ejemplo para reemplazar:  Lamparita incandescente de 100 watts, busca una que ofrezca cerca de 1500 lúmenes, como las ahorradoras espirales de 23 watts de GE, que duran 10 mil horas y ofrecen un ahorro de energía de 77%.  Incandescente de 75 watts: busca una lámpara cercana a 1100  lúmenes, por ejemplo, las espirales de 18 a 20 watts de GE  Incandescente de 60 watts: utiliza una lámpara cercana a 800 lúmenes, por ejemplo, las espirales de 13 a 15 watts de GE  Incandescente de 40 watts: busca una lámpara cercana a 490 lúmenes, por ejemplo, la lámpara LED A-line Energy Smart ® de GE. Consumiendo apenas 9 watts, tienen vida útil de hasta 25 mil horas, es decir ¡pueden durar más de dos décadas! 2. Índice de Reproducción de Color (IRC): Este índice es el parámetro clave que determina con cuánta fidelidad se reproduce un color en comparación con una fuente de referencia. Típicamente la luz solar es la referencia. Este índice varía de cero a 100 y cuanto más alto el IRC, mejor definidos se ven los colores.  Un índice igual o superior a 82 (dentro de la escala de 0 a 100) se considera muy bueno.

3. Temperatura de color: medida en grados Kelvin, la temperatura de color puede modificar la atmosfera de un espacio. Cuanto más alto el valor de la temperatura, más fría o blanca se ve la luz. Por otro lado, cuanto más bajo ese valor, más cálida o amarilla será la luz. Los productos estándar varían de 2700 a 6500K.  Se sugieren soluciones de iluminación con colores más blancos (alta temperatura) para los lugares donde se realizan tareas, como la cocina o el baño. Cuanto más amarilla la luz, más acogedor se percibe el ambiente.

Aplicando los nuevos conceptos La iluminación es un elemento importante de la funcionalidad y decoración de tu casa.  Antes de  iniciar el plan de iluminación para cualquier parte de tu hogar, observa sus características físicas, las actividades que se realizarán allí y las sensaciones que queres transmitir.

En la cocina, por ejemplo, lo esencial es que la luz esté bien distribuida, sin dejar áreas oscuras, y que sea flexible para concentrarla en un área específica para la realización de tareas como cocinar. Compactos fluorescentes  (CFLs) de 4100K o 6500K son una buena opción.

En caso que el espacio así lo permita, considera instalar lámparas LED PAR 30 de 10 watts de haz abierto a la misma distancia a lo largo de todo el techo de la cocina. La PAR 30 LED de GE entrega 500 lúmenes, ofrece una vida útil de 25 mil horas y su índice de reproducción de color es de 80. Cuando los techos sean altos, se sugiere utilizar lámparas GE LED PAR 38 de 20 watts, con un ahorro en el consumo de energía de hasta 73% cuando comparadas a las halógenas de 75 watts. La Par 38 LED de GE entrega 1050 lúmenes, ofrece una vida útil de 25 mil horas y su índice de reproducción de color es de 80.

Este 22 de abril: ¡ANIMATE A CAMBIAR!