Anna Stépanoff, CEO y fundadora de Wild Code School, es una de las 50 mujeres imprescindibles del sector tecnológico en Francia, según la prestigiosa revista Forbes
Wild Code School, la escuela de programación y desarrollo web líder en Europa, ha lanzado su segundo bootcamp con una nueva convocatoria de alumnos en su recién abierto campus de Madrid. Para celebrar la buena acogida de la escuela en la capital española, Wild Code School ha invitado a varios expertos a una mesa redonda para debatir sobre las habilidades del trabajador del futuro, tanto digitales como las llamadas soft skills. El evento ha contado con la participación de los siguientes ponentes expertos en la materia: Anna Stépanoff, CEO de Wild Code School; Catalina Díez, Responsable de Estrategia de Talento en Manpower; Neus Portas, Directora de Learnability Hub; y Jorge Gil, Director General de IDC Research España. La mesa redonda ha estado moderada por Quino Fernández, CEO de Conector Startup Accelerator. Tras dar la bienvenida a los participantes, Anna Stépanoff, una de las 50 mujeres consideradas imprescindibles del sector Tech de Francia, según Forbes, ha agradecido la excelente acogida de Wild Code School en España, y ha resaltado que se trata del único país, con la excepción de Francia, donde cuentan con dos campus (Barcelona y Madrid). Stépanoff ha destacado la rápida expansión de Wild Code School en Europa con una red formada por 24 centros, lo que se debe, según su opinión, “a una metodología propia y única, ya que los cursos de programación y análisis de datos están enfocados en la práctica real y en la carrera profesional. El 90 % de nuestro alumnado consigue una mejora laboral, o bien un primer empleo en el campo de la programación”, ha subrayado. Sobre las soft skills, Stépanoff ha recordado que son innatas a cada persona, pero que se pueden entrenar para reforzarlas. "En la actualidad, las empresas valoran cada vez más las soft skills porque los requisitos de talento tecnológico han cambiado y en el sector de la programación, por ejemplo, ya no se trabaja como antes. La mayor parte del desarrollo de un proyecto o un prototipo se realiza en colaboración con diferentes equipos, incluso equipos remotos en todo el mundo y, por lo tanto, debe poder interactuar con otras personas, desarrollar tecnologías juntas, codificar y llegar a una solución juntos para poder satisfacer las necesidades de sus clientes", ha resaltado. Respecto a las oportunidades laborales del sector de la programación, Catalina Díez ha asegurado que en España se necesitan alrededor de 300.000 perfiles y ha ensalzado los cursos tipo bootcamp de Wild Code School porque permiten una formación intensiva y de gran calidad en el menor tiempo posible (5 meses), por lo que la incorporación al mundo laboral es prácticamente inmediata. “El escenario laboral al que se enfrentan los candidatos es cada vez más complejo, ya que cada vez es más importante ser una persona flexible, con talento y con soft skills desarrolladas”, ha asegurado. Por su parte, Jorge Gil ha afirmado que ahora más que nunca antes se necesitan escuelas de programación de código de calidad, poniendo como ejemplo el modelo educativo de Wild Code School. “Es difícil encontrar candidatos preparados en este campo, por lo que esta clase de centros cumplen con una función muy importante para el desarrollo tecnológico de nuestro país”. Para Neus Portas, el sector laboral demanda cada vez más que la persona se esfuerce y salga de su zona de confort. “Que pueda cambiarse con facilidad uno de los seis sombreros”, en referencia a la metodología en la que cada uno de los sombreros de distinto color (blanco, rojo, negro, amarillo, verde y azul) representa un prisma desde el cual es posible observar la realidad. El talento digital del mañana Wild Code School es una red europea de campus tecnológicos que ofrece un programa intensivo en cinco meses y 712 horas de duración, para el curso de web development, es decir, programación aplicada al desarrollo de páginas en internet y estructuras subyacentes, con un factor especial que la diferencia de otros centros, pues embarca a los alumnos en "proyectos reales", donde trabajan desde el primer día con empresas asociadas en el desarrollo de pequeñas tecnologías, familiarizándose así con el trabajo por proyectos bajo demanda, como en un entorno real. Wild Code School está comprometida con los profesionales y las empresas para satisfacer la necesidad de preparación de los primeros y la cada vez más alta demanda de talento de los segundos. Para ello, y en pocos meses, forma a profesionales operativos y adaptados a los cambios tecnológicos gracias al enfoque práctico y a los proyectos reales que los estudiantes realizan durante la formación.