Hoy en día, buscar una vivienda que se ajuste a unos criterios de calidad y seguridad en el proceso de alquiler o venta es una tarea para la que se necesita tiempo.
Una de las primeras dudas que surgen al momento de buscar vivienda o sacar la suya propia al mercado es si hacerlo por su cuenta o dejarlo en manos de empresas inmobiliarias profesionales.
Según informes del Instituto Nacional de Estadística, en los últimos años más del 30% de los alquileres se han llevado a cabo a través de agencias inmobiliarias. Aunque inicialmente el proceso por medio de estos agentes puede suponer un coste adicional, a largo plazo conlleva ciertas ventajas tanto para el arrendador del inmueble como para el arrendatario.
Ventajas de contratar una empresa inmobiliaria de prestigio
Optar por una agencia inmobiliaria que lleve el trámite integral del alquiler o venta, el arrendador podrá tener la tranquilidad de que las normas pactadas en los contratos serán cumplidas al pie de la letra, dejando toda la responsabilidad en manos de los agentes profesionales. Mientras tanto, los inquilinos tendrán la certeza de estar atendidos en todo momento para cualquier necesidad que pueda surgir.
Es importante que antes de elegir una inmobiliaria se proceda a realizar una pequeña investigación sobre los servicios que ofrece y su forma de trabajar, siendo esta la base de la relación del cliente con la empresa. Desde inmobiliaria GNF, inmobiliaria ubicada en Pamplona con más de 30 años de experiencia en el sector, destacan la importancia de elegir una empresa por confianza, forma de trabajar, reputación y el precio de los servicios.
Una vez realizada la elección, se realizará el contrato de prestación de servicios correspondiente previamente pactados entre la inmobiliaria y el cliente. En este documento se establecen las bases y condiciones del servicio, así como los honorarios que recibirá la empresa inmobiliaria.
Posteriormente, la agencia contratada realiza una visita y un informe de las condiciones del inmueble para evitar cualquier tipo de problema que pueda surgir al respecto. También se encarga de su promoción vía web y portales inmobiliarios, así como de comprobar la solvencia de los inquilinos candidatos, y otras muchas cuestiones relacionadas con avales, fianzas y depósitos.
Es importante que la empresa conozca el mercado inmobiliario a fondo y, sobre todo, que pueda amoldarse a las necesidades de los clientes. En inmobiliaria GNF, su objetivo es encargarse del proceso de venta o alquiler de inmuebles de principio a fin, en el menor tiempo posible y sin que el cliente tenga que preocuparse por nada.
El inquilino, por su parte, tendrá la certeza de alquilar un piso en las mejores condiciones de habitabilidad y en el menor tiempo posible. Además podrá contar con un asesoramiento profesional que le evitará cualquier problema relacionado con cláusulas abusivas o términos poco coherentes.
Hay caseros e inquilinos que a pesar de todas las ventajas anteriormente mencionadas optan por prescindir de los servicios profesionales por miedo a que los servicios ofrecidos les salgan caros. Cabe destacar que la remuneración de las inmobiliarias por gestionar los alquileres no se encuentran estipulados por la ley, un punto que debe quedar claro desde el inicio del proceso.
Siempre y cuando exista una comunicación entre la inmobiliaria, el arrendador y el arrendatario involucrados, todos podrán gozar de una gestión segura con todas las necesidades cubiertas.