Las pulseras 'Candela' se han convertido sin esperarlo, en una de las mayores campañas solidarias en España. Candela es una niña a la que con ocho años le diagnosticaron leucemia y fue ingresada en el Hospital Sant Joan de Déu de Barcelona.
Una voluntaria del centro le enseñó a hacer pulseras para distraerse durante las largas horas que pasaba en el hospital, y ella a su vez le enseñó a sus dos amigas, Daniela y Mariona, quienes comenzaron a venderlas para recaudar dinero para el hospital. La magia se extendió rápidamente y tres años después, las pulseras 'Candela' han conseguido recaudar un millón de euros para la investigación del cáncer infantil.
En la planta ocho del hospital, todos aprendieron a tejer pulseras de hilo que se vendían a tres y cinco euros. También se sumaron familiares y amigos. Se elaboraron y vendieron más de 274.000 pulseras. Así consiguieron recaudar un millón de euros, el 50% del presupuesto de investigación en oncología del hospital, con los que se pudo ampliar la plantilla de investigadores del centro, que cuenta actualmente con seis líneas de investigación.
En la actualidad, y tras un trasplante de medula, Candela, que ha cumplido 11 años, ya hace vida normal.
Cada año, se diagnostican en España 1.400 casos nuevos de tumores malignos en niños. El cáncer más frecuente en la infancia es la leucemia, seguido de los tumores del sistema nervioso central, el linfoma no-Hodgkin, la enfermedad de Hodgkin y el tumor de Wilms en el riñón, el Sarcoma de Ewing y el cáncer de tiroides.
El cáncer es la primera causa de muerte por enfermedad en la infancia, y según la Sociedad Española de Hematología y Oncología Pediátricas (SEHOP) la supervivencia de los niños diagnosticados a los cinco años es del 81%.
El contenido de este comunicado fue publicado primero en la web de Bebés y más