Un Boeing 787 Dreamliner es un avión bastante decente en tamaño, en él fácilmente caben 232 pasajeros y se puede estirar hasta 335 en algunas configuraciones. ¿Qué pasa si las quitamos todas y montamos un avión de lujo? Pues ese es el trabajo de una compañía llamada Kestral Aviation Management y os vamos a enseñar qué es lo que consiguen.
El avión que os enseñamos en imágenes ha sido vendido a un operador de vuelo asiático, del que no se conoce nombre
En el modelo concreto que compartimos también está la mano de la empresa de diseño Pierrejean Design Studio. Ambas compañías han transformado los 222 metros cuadrados que ofrece el interior del Boeing en un auténtico espacio de confort completamente personalizado, ideal para viajar cómodo o hacer negocios de altura.
Cuarenta pasajeros VIP
El avión privado no acaba con todas las plazas posibles, todo lo contrario, en la nueva configuración quedan 40 plazas utilizables, como podéis comprobar en los butacas con giro y sofas de varias plazas que aparecen dispersados por la nueva estancia. ¿Dónde están los cinturones de seguridad? De las cuarenta plazas, dieciocho puestos son los típicos de primera clase que hay en vuelos de larga duración.
La tripulación va a disfrutar de un ambiente diáfano, como un gran salón en el que no faltan sistemas de audio y vídeo o mobiliario de diseño. Todo el interior parece reconfigurable para formar una gran mesa para comidas de negocios.
La parte más llamativa me parece la de la zona más personal o privada, donde está el cuarto de baño - con ducha y lavabos - y la cama de matrimonio, todo en unas dimensiones y diseño que bien podrían pertenecer al de un hogar de lujo.
¿Cuánto cuesta la transformación de Kestral? Pues concretamente no lo sabemos, pero sí el precio del avión con ella, que asciende a 300 millones de dólares. Haciendo cuentas rápidas según lo que vemos en la red, podemos determinar que es prácticamente el doble de lo que cuesta el avión.
La noticia Esta compañía transforma Boeings 787 en hoteles de lujo volantes fue publicada originalmente en Xataka por Kote Puerto .